Turrón de guirlache artesano
Turrón duro con miel, caramelo y almendra marcona con piel.
De origen aragonés, el popularmente llamado "turrón duro quemado" es un turrón muy festivo como el de Alicante, sobre todo por su corte. Se puede cortar de muchas maneras, pero la que explicaremos aquí es la más divertida.
Se necesita:
-1 barra de turrón de guirlache Antonio Plá Ferrándiz
-1 cuchillo de hoja ancha
-1 mano de mortero o 1 martillo
-1 madera de corte
-1 grupo de gente bien avenida
-buen humor
-ganas de pasarlo bien
-1 persona mínimo que pase el dedo por las migas
Se reúne el grupo de gente bien avenida alrededor de la mesa. Se pone la barra de turrón de guirlache en la madera de corte, se marca el trozo a cortar con el cuchillo. Se da un golpe certero (o se intenta) con la mano de mortero sobre el cuchillo. Si tenemos suerte o pericia el corte saldrá limpio, si no nos echamos unas risas mientras que el encargado de recoger las migas hace su trabajo y le pasamos el turno al siguiente. Es por eso que solamente lo hacemos en formato barra catalana (750g aprox.) porque el guirlache no es un turrón para comer en soledad.
Es apto para intolerantes a la leche de vaca, al gluten, a la soja y a los sulfitos pero no lo pueden consumir aquellos que no toleran los frutos secos, ni el sésamo, ni el huevo. Destaca un fino sabor a miel y caramelo, tiene sabor de almendra tostada de fondo y textura crujiente.